Viernes, 22 de Noviembre del 2024
Las autoridades policiales de Colombia revelaron detalles macabros del ataque ejecutado ayer por las FARC contra una base de carabineros en el puente internacional de San Miguel, Putumayo, en la frontera con Ecuador.
Cuando los carabineros de la Policía Nacional se disponían a recoger los cuerpos de sus ocho compañeros asesinados y a atender a los heridos, descubrieron que uno de los uniformados había sido cargado con explosivos ocultos listos para explotar. El engaño fue descubierto a tiempo y se tomaron las precauciones necesarias para que no cumpliera con su devastador objetivo.
Según explicó el director de la Policía, el general Óscar Naranjo, el objetivo de los frentes 48 y 15 de las FARC -los mismos que prestaban seguridad al muerto líder Raúl Reyes- era tomar el poblado de San Miguel.
“Hubo información oportuna y los miembros del escuadrón se organizaron en patrullas y coparon trochas y caminos para cerrarles el paso a los guerrilleros y proteger a la población civil. Es entonces cuando se producen los combates”, detalló el general Orlando Páez.
Unos 70 guerrilleros utilizaron morteros artesanales y rampas con cilindros para atacar al Escuadrón Móvil de Carabineros. Un mortero impactó a la base, donde había alrededor de 50 policías, y mató a 7. El balance final fue de 8 muertos y un herido.
Para cubrir su retirada, los atacantes instalaron minas en una zona de paso obligado para los habitantes de San Miguel. La Defensoría del Pueblo había emitido un alerta por posibles acciones de las FARC contra los habitantes de ese poblado. Dos días atrás, guerrilleros habían pasado por San Miguel y amenazado a comerciantes.
Funete: Infobae
