Según informan diversos medios europeos, Madonna había anunciado desde hace tiempo que se regalaría 160 mil euros para realizarse cirugías plásticas y estéticas. Además pagó una fiesta en un selecto y privado club londinense en compañía de sus seres queridos.
La cantante comenzó los festejos de su cumpleaños en un local de moda de Londres junto a su novio brasileó, Jesús Luz.
Según publica Europa Press, la pareja, que hace unos meses superó una crisis, estuvo acompañada en todo momento de la hija de la cantante, Lourdes.
Los tres juntos acudieron al Schoredicht House donde Madonna lució su figura con un elegante vestido gris satén y un bolso con un original cierre en forma de crucifijo, motivo que también llevaba discretamente colgado al cuello.