Sábado, 23 de Noviembre del 2024
A 18 trabajadoras de una fábrica calzado les mandaron mensajes mientras estaban de vacaciones.
Las afectadas explicaron que, el pasado jueves 26, durante sus vacaciones, recibieron un escueto SMS con remitente desconocido, al parecer, de la empresa portuguesa “Pinhosil”, según publicaron medios de Portugal.
“A partir del lunes, la empresa va a cerrar. Recibirán la carta para el desempleo”, rezaba el mensaje.
Las trabajadoras decidieron protestar en las puertas de la fábrica Pinhosil, situada en la localidad de Arouca, cerca de la norteña ciudad de Oporto, indignadas por la forma de actuación de la empresa y aseguraron que los patrones de la unidad fabril ni siquiera atendieron a sus llamadas.
