Jerusalén/París/Moscú.- Los Gobiernos de todo el mundo reaccionaron con indignación y preocupación al informe presentado el jueves por el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) de la ONU, en el que se hablaba de evidencias de que Irán podría desarrollar armas nucleares.
Fue la primera vez que el organismo dependiente de la ONU se pronunció en términos tan explícitos sobre el programa de actividades nucleares de Irán.
Irán, por su parte, desestimó las sospechas. “No son nada nuevo, sino que llegan a ser aburridas”, cita la agencia iraní ISNA al embajador iraní en el OIEA, Alí-Asghar Soltanieh, quien cree que las sospechas ya fueron expuestas antes.
Israel exigió sanciones efectivas contra Irán. “La comunidad internacional y sus instituciones deben imponer sanciones contra Irán en la primera oportunidad, que ilustren el alto precio que pagará si continúa en su programa nuclear”, según el Ministerio del Exterior.
Francia, dijo un portavoz del Ministerio de Exteriores en París, vio confirmadas las preocupaciones de la comunidad internacional por el programa nuclear iraní. El informe “demuestra lo importante que es actuar decididamente”, agregó.
Alemania se sumó a los temores del OIEA, dijo el portavoz del Gobierno alemán, Ulrich Wilhelm, quien destacó que el Gobierno de Irán se ha negado a acatar resoluciones vinculantes del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
EE. UU. y otros países creen que Irán trabaja en pos de la construcción de armamento nuclear y urgen una nueva ronda de sanciones de la ONU contra Teherán.
Rusia llamó a Irán a responder al informe. “Irán debe despejar esta sospecha”, dijo el vocero del Ministerio ruso de Relaciones Exteriores, Andréi Nesterenko, citado por la agencia de noticias Interfax.
(FIN) NDP/GCO