La secretaria de Estado de EE UU, Hillary Clinton, ha rechazado el acercamiento de Washington hacia Corea del Norte en temas nucleares tras la liberación de las dos periodistas estadounidenses por parte de las autoridades norcoreanas. Las reporteras Laura Ling y Euna Lee han aterrizado en territorio estadounidense esta madrugada hora de Los Ángeles, donde fueron recibidas por su familiares, en un encuentro muy emotivo.
Dentro de su gira por África, con una primera parada en Kenia, Clinton ha negado que su marido Bill, que ha sido el enviado de la Casa Blanca para liberar a las dos periodistas, haya entablado conversaciones con Pyongyang sobre su programa nuclear. “Eso no es cierto. Eso no ocurrió”, ha asegurado la responsable de Exteriores. “Siempre lo hemos considerado un tema totalmente diferente a nuestros esfuerzos por reconducir las negociaciones con Corea del Norte, conseguir una verificable desnuclearización y hacer regresar a la península coreana a las conversaciones a seis bandas”, ha añadido.
El gesto del viaje del ex presidente estadounidense ha llevado a los analistas políticos de Washington a pensar que Corea del Norte y EE UU buscan un nuevo comienzo en el diálogo entre ambos países, después de unos meses en los que parecían apagarse las esperanzas de que la llegada de Obama significara un punto y aparte en las relaciones bilaterales.
Según la televisión oficial del régimen, Central TV, Clinton y el dictador norcoreano Kim Jong-il “intercambiaron un amplio abanico de opiniones sobre asuntos de interés mutuo”. Los medios estatales informaron, además, de que Clinton le entregó al líder norcoreano un mensaje verbal de Obama, algo que la Casa Blanca ha negado y también la propia Hillary desde Nairobi, donde se ha limitado a decir que está “muy feliz y aliviada” después de que el Gobierno de Corea del Norte concediera la excarcelación de dos periodistas norteamericanas que trabajan para la cadena de televisión estadounidense Current TV.
Las gestiones exitosas de Clinton recibieron también el reconocimiento del presidente Barack Obama, quien manifestó sentirse “extremadamente aliviado” por la liberación de las dos jóvenes.
“Quiero agradecer al presidente Bill Clinton, con quien ya conversé, por los extraordinarios esfuerzos humanitarios que resultaron en la liberación de las dos periodistas”, ha dicho Obama.
Encuentro emotivo
El reencuentro de las periodistas con sus familiares, al pie de la escalerilla del avión, seguido en directo por las cámaras de televisión, fue extremadamente emotivo, especialmente por la forma en la que la hija menor de Euna se agarró al cuello de su madre nada más verla.
Entre las personalidades que les esperaban en el aeropuerto junto a su familia, se encontraba el ex-vicepresidente Al Gore, que es el fundador de la cadena de televisión en la que trabajan.
Minutos después de que bajaran del avión las liberadas lo hizo el ex-presidente Bill Clinton, quien fue efusivamente saludado por su colega, Al Gore, así como por los familiares de las detenidas, quienes le expresaron su agradecimiento.