El presidente de Cuba, Raúl Castro, ha pospuesto la celebración del primer Congreso del Partido Comunista en 12 años, retrasando así una reunión que fijaría el rumbo del régimen y decidiría si su hermano Fidel continúa como primer secretario de la única fuerza política de la isla.
Según informa hoy el diario oficial Granma, la decisión fue adoptada el pasado miércoles por el Comité Central del Partido Comunista (PCC) y todavía no se ha establecido nueva fecha para la celebración del Congreso.
“El VII Pleno del Comité Central del Partido acordó posponer la realización del VI Congreso del Partido hasta que se haya vencido esta crucial etapa de preparación previa”, explica el diario citando a Raúl Castro.
El presidente cubano señala que en esta edición el Congreso analizaría la situación de la economía, los logros y las asignaturas pendientes del sistema adoptado en la isla tras la Revolución de 1959. “Lo más probable es que, por ley de la vida, sea el último que encabece la dirección histórica de la Revolución”, remarca.
El Congreso podría cerrar la sucesión del poder entre los hermanos Castro, proceso abierto hace exactamente tres años con la enfermedad de Fidel. El último Congreso del PCC, al que la Constitución describe como la “fuerza rectora” de la sociedad cubana, se celebró en octubre de 1997, aunque en teoría es quinquenal.